En defensa de la EDUCACIÓN INTEGRAL del ciudadano del Siglo XXI

Cansado de los ataques a una concepción integral de la EDUCACIÓN, propongo alzar la voz de la sociedad.

lunes, 18 de enero de 2010

La educación física en la escuela rural.

Llevo varios años en la universidad y el comentario siempre es el mismo. José ¿y la escuela rural?

Son comentarios que vienen de esos exalumnos/as que profesionalmente han ido a parar (como un porcentaje muy alto) a esos destinos singulares. Exalumnos que (supongo) me quieren bien y tratan de incitarme a mejorar las lagunas de su formación inicial y que ahora han tenido que aprender a base de darse de “leches” con la tozuda realidad de los grupos multinivel.


La Universidad es una maquinaria tan grande y tan torpe que a veces olvidamos donde está el Norte. Y si ya nos ponemos a hablar de algo “transversal”, olvídate del tema. Como dicen en mi casa “los que es de todos, para nadie”, y al final “nuestras” asignaturas son lo más importante.


La escuela rural es una olvidada en los planes de estudio de maestro. No sólo en Aragón, si no en toda España. Una pena. Y si ya nos ponemos a hablar de Educación Física y escuela rural, ni te cuento.

Pero la realidad, como decía antes es muy tozuda. Muchos itinerantes que curran de lo lindo, con más ilusión que medios y que hacen una labor brutal al sistema educativo.


Pues basta ya. Este curso, después de leer la tesis, nos planteamos lo siguiente. Montar un curso, y si nos sale bien la jugada, el año que viene una asignatura departamental (de esas que se hacen

“gratis et amore”. Vamos a ver que tal. Como dice Javier Zaragoza, “como no tenemos charcos, pues dos más”.


Bueno os cuento el curso, … o mejor lo veis. Os pongo el link y os lo bajáis. Es el curso que lleva por título “La Educación Física en contextos singulares: En la escuela rural y en la educación infantil". Y si queréis me contáis. (aquí)


Un saludo pedagógico.



viernes, 15 de enero de 2010

Sí, ¡yo soy el de Educación Física!

Sí, ¡yo soy el de Educación Física! Formo parte de un cuerpo especial, de un grupo de docentes privilegiados, de un una banda de ilusionados, de los que conectan con sus alumnos, de los que valoran la educación en toda su globalidad, de los que tratan de mejorar día a día, de los que se sienten solos en los Claustros, de los que las familias no solicitan su acción tutorial, de los que pasan frío y calor por esos patios, de los que todavía les queda mucho por aprender, de los olvidados por la administración... Si, soy el de Educación Física.


Cuando los cimientos de la escuela se tambalean porque sus enseñanzas han dejado de interesar a nuestros alumnos, la Educación Física se muestra como uno de los pilares que aún la sostienen. Los niños vienen al cole de otra manera cuando toca "gimnasia". Llegan con ilusión y motivación. ¿Qué se le habrá ocurrido al maestro? ¿Maestro que vamos hacer hoy?. Esas preguntas nos llenan de satisfacción y aumentan nuestra maltrecha autoestima. Es entonces cuando nos colgamos la placa en el pecho, como si Sherif se tratara. ¡Somos los de Educación Física!.


Con nuestros alumnos nos sentimos importantes porque ellos nos valoran. Cabalgamos de clase en clase como un "Llanero solitario", porque somos los de Educación Física. Nuestros alumnos están ávidos de dar su clase de Educación Física, recogen rápidamente los libros y sus enseres en cuanto abrimos la puerta del aula, esas caras aburridas se transforman, los ojos le brillan, echan chispas, en sus rostros se empiezan a dibujar sonrisas, están impacientes, se mueven de las sillas, se nota un cierto nerviosismo por salir al patio cuanto antes, ha llegado el de Educación Física.


Somos especiales porque nuestra asignatura es especial, aprovechemos su motivación intrínseca. No dejemos escapar esa gran oportunidad educativa. Apriétate el cinturón, colócate bien la placa, ajústate el sombrero y vamos a jugar, vamos a crear situaciones de aprendizaje en donde los niños se sientan a gusto, seguros, ilusionados, con ganas de moverse...


Aprovechemos la motricidad para educar, formemos personas competentes, trabajemos sus emociones y sus relaciones sociales, hagamos de ellos personas más autónomas y autosuficientes, mejoremos su autoestima, fomentemos su creatividad, desarrollemos su capacidad de esfuerzo...


Olvidemos nuestras frustraciones profesionales, esquivemos las zancadillas que nos pone la sociedad, ignoremos los prejuicios sobre nuestra área. Somos como los "Hombres de Harreson" o el "Equipo A", como Chuck Norris, Rambow o Superman. Sintámonos orgullosos de lo que somos. Te vuelvo a decir, somos un cuerpo especial.


Nos reducen los horarios, se nos marginan de las competencias básicas, ¿y la competencia motriz, dónde está?, la especialidad desaparece de la formación universitaria de magisterio,¿ a dónde vamos a ir a parar?... Quieren alumnos competentes, ¿pero en qué? En lengua, matemáticas y en el conocimiento e interacción con el medio. ¿Y las otras cinco competencias? ¿Quien las va a desarrollar? ¿Cómo puede interactuar un niño desde su pupitre? ¿Como puede mejorar su autonomía personal si no ha desarrollado sus cualidades y habilidades y destrezas motrices? ¿Cómo puede interactuar con los demás si sólo puede relacionarse con los compañeros de las mesas que hay a su alrededor?...


Está claro que somos un "grano en el culo" para la administración, entorpecemos los horarios, nos tienen que suplir las bajas con otros especialistas, no lo pueden hacer con los de apoyo o con otros docentes del centro. Ahora todos generalistas y volvemos al dicho de antes "El maestro Liendre de todo sabe y de nada entiende". Sí, en eso parecer ser que consiste una educación de calidad, en crear un profesorado más técnico (la carrera durará 4 años), pero menos especializado en nada.


¡Somos los de Educación Física! Desafortunadamente que poco nos quedará por serlos. Nos están pidiendo la placa y el arma, pero si al final todos somos generalistas, no olvidéis vuestras raíces, porque ¡Somos los de Educación Física!


Juan Carlos Muñoz Díaz


CAMPAÑA POR EL ORGULLO DE SER DOCENTE DE EDUCACIÓN FÍSICA. PÁSALO...