Siempre se han sido considerado las fiestas menores de Teruel. Recuerdo de pequeño todos los chiringuitos por el centro histórico poniendo tapas de vino y jamón. Era impresionante. Ahora todo se ha actualizado a los tiempos. Hay concurso de tapas con el jamón de Teruel de protagonista (recomiendo las tapas del Café Pub Happiness), concurso de cortadores de Jamón de Teruel (todo un arte), una feria para profesionales en la Palacio de Congresos y Exposiciones, se hace coincidir con la concentración de motos (la más antigua de España) y hay acciones variadas. Sin lugar a dudas, la más espectacular es un bocadillo de jamón de 300 metros, del que se cortan unas 11.000 raciones.
Recuerdo que cuando todo esto comenzó a tener una dimensión grande, se configuró el Consejo Regulador del Jamón de Teruel, para que se velara por la calidad de este magnífico producto Aragonés.
Como alumno recuerdo que el comienzo de curso siempre estaba marcado por esta fiesta y algún maestro avispado (como por ejemplo, a Bienvenido, mi tutor de quinto de EGB) le servía para hacer alguna actividad “situacional”.
Es un placer indescriptible. Están invitados a Teruel a degustar este manjar.
1 comentario:
JJ, tu siempre has sabido pasarlo bien. Me alegro por ti y tu familia que disfrutéis de estas fiestas tan suculentas.
A ver cuando puedo bajar a probalas.
Saludos.
Juanito
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